Los ojos se encuentran permanentemente expuestos a los factores ambientales como sol, agua, radiaciones, polvo, químicos y alérgenos. Sus barreras naturales la constituyen las lágrimas las cuales contienen defensas, oxígeno y nutrientes, su secreción refleja es inducida para lavar cualquier cuerpo extraño que haya penetrado hasta la superficie ocular.
Los párpados con su rápido cerrar ante ruidos, luces u objetos y el reborde orbitario que protege contra golpes y traumatismos directos que podrían ocasionar lesiones o estallidos del globo ocular. La cornea o parte anterior del globo ocular es muy sensible alertándonos cuando una pestaña o cuerpo extraño se introduce en nuestros ojos.